25 de mayo de 2010

Silencio

Necesito decir lo que mis labios no dicen, lo que mi corazón guarda aquí dentro, en mí, pero pienso que mis palabras no pondrían explicar eso que me bulle y que al emitir sonidos en mi garganta convertirían mi poesía en algo banal. Ya no quiero que sigan viviendo esas sensaciones en mí porque ya no caben y se desbordan, pero siguen… Ahora el silencio es mi aliado, me entiende y comprende que mi boca esté cerrada y por eso él no me permite emitir sonido alguno.

Mundo de silencios en los que hay cabida para todo, para lunas rotas y soles devastadores, para tristezas profundas y desesperaciones, mundo de silencios para no amar, ni entender, para no llorar, ni reír, silencios para no pensar…

En el bosque de mi interior hay caminos sinuosos, largos y complicados de caminar que conducen todos al mismo lugar, a la inmensa pena de comprender que los mares están secos, que los soles no calientan y las lunas no iluminan un sentimiento. Todo se resquebraja ante la evidencia de lo banal, de lo mordaz, se hace añicos porque ya no quiere estar intacto, porque comprende que lo real, lo que se encontrará si sale es pura falacia, es puro teatro, pura ironía, algo vacío…y mi silencio me advierte de eso, me alerta constantemente y me impide vocalizar…

Es mi silencio que chilla, mi silencio blanco.


Blondie

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