Se puede bailar un vals antes de nacer estando en el útero, después de nacer durante toda una vida y seguir bailando un vals eterno, ligero de equipaje en otra dimensión, lo importante no es bailar con los pies sino bailar con el alma...
Aquél que baile así entenderá que siempre bailará su penúltimo
vals abrazado a los corazones de quienes le aman, el amor es eterno, intangible e inconmensurable…
No hay un último vals, siempre será el penúltimo…
maliZia kiss
La tarta está llena de velas, son largas, verdes y delgadas. Cada una de ellas es un año vivido, un año grabado a fuego en la memoria, un
año lleno de alegrías de tristezas, de momentos taciturnos y de aprendizaje,
cada año que pasaba era más sabia.
En la tarta de hoy tiene acumulada mucha experiencia y sobre
todo esa satisfacción de haber hecho bien las cosas, de verse recompensada de
gentes que la quieren, de ver que todo ha salido como ella imaginaba…
Me acerco sigilosamente por detrás y la abrazo, puedo sentir
su olor, ese olor a ella, a frescura, a sabiduría, le doy un beso y le pido que
apague sus velas y que pida su deseo, aunque lo que ella no sabe es que le
ayudo a soplar y el deseo es mío, ese deseo de que ella siempre me acompañe…
Una luz intensa me envuelve, me hace sentir reconfortada,
puedo oír su risa y sentir sus caricias y sonrío…
Solo me queda una duda, ¿mamá que te ha regalado papá?. No lo sé ahora, aún no me lo has dicho, pero sé que cualquier día de estos me sorprenderás con tu
respuesta…
maliZia kiss
