Es Caprichoso El Sentir
Una vez hace mucho, mucho, mucho tiempo un chico de aspecto huraño y mirada baja apenas si abría la boca, tan solo para comer lo hacía, pero jamás para hablar. Los días que se sentía más osado era capaz de llegar a unir tres palabras y formar una frasecita corta y ese día ya había cumplido con su cupo de conversación. Así era él y no había nada que hacer, se había encerrado en su mundo y no pensaba salir de él por nada del mundo, por nada…
Frente a él había una mujer que era la otra cara de la moneda, hacía tiempo que había vencido su timidez, se sentía segura de si misma y sabía moverse en cualquier ambiente con soltura. Tenía claro que a la vida había que agarrarla por los cuernos como a un toro y así actuaba en la vida, enfrentándose a todo y mirando a los ojos, sin temor a nada…
Pero eso fue hace mucho, mucho, mucho tiempo. Ahora los papeles se habían invertido y el chico huraño de mirada triste y baja miraba al frente sintiéndose feliz y cada día más contento y más seguro, necesitaba que arrancasen sin piedad su interior y un dia se dejó…
Ella para conseguirlo tuvo que desnudarse, sí, desnudar su alma y ahora era ella la mujer insegura de aspecto huraño, la que miraba continuamente al suelo cuando estaba frente a él…
Blondie