Y Yo Me Pregunto...

Tengo un Facebook con amigos y amigos de amigos y conocidos y algunos de los que me estoy haciendo amiga y un Twitter con muy poco seguidores porque lo abrí, como quien dice anteayer y ni me he molestado en publicitarlo, pero que a mi me gusta, lo uso para poner de la forma más sintetizada posible lo que me pasa por la cabeza en cualquier momento y en cualquier lugar y tengo un loko diván en el que me expreso más largo, en el que cuelgo relatos míos que se ajustan algunos a la realidad y otros a la más pura de las ficciones, un lugar para mis lokuras y mis korduras, un espacio para mi. Mi espacio.

 Bueno a lo que iba, tengo un Facebook, un Twiter y un loko diván, pero ahora resulta que ya no me empiezo a sentir libre, empiezo a sentir una mano opresora invisible que me hace pensar y lo que es peor aún sentir si lo que yo pienso y plasmo por escrito incomodará a alguien y me dirán que hago apología del terrorismo o enaltecimiento o que provoco alteración de masas, empiezo a pensar que en mis escritos no puedo utilizar determinadas palabras que entren en el chequeo que hacen continuo de nuestras manifestaciones porque igual lo que pongo no gusta a quien lo lee e irrumpen en mi casa unos individuos encapuchados para detenerme, empiezo a pensar que esa mano opresora que siento se aleja segundo a segundo de lo que yo siento que es democracia y se acerca peligrosamente a lo que tanto me horroriza y se llama dictadura del miedo…

A mi me parece que el gobierno está utilizando los medios de los que dispone para que seamos nosotros mismos los que nos autocensuremos, que empecemos a pensar ¿debo o no debo poner esto o aquello?

Y yo me pregunto…

¿Dónde estoy viviendo ahora?, ¿hacia donde debo dirigirme?, ¿en que clase de país se está convirtiendo mi casa?.

Yo entiendo que las redes sociales tienen mucha fuerza y que pueden llegar a ser muy peligrosas y entiendo que El Estado tenga y deba de controlar si hay delitos graves de exaltación del orden público, pero también entiendo que a mi me gusta expresarme con libertad, sin temor, poder manifestar públicamente las cosas que no se están haciendo bien en un país al que amo y en el que he votado siempre con orgullo por una democracia.

Por eso yo me pregunto…

¿En que punto me encuentro ahora yo?

Como decía George Orwell en su prefacio de libertad de expresión de su libro Rebelión en la Granja: Si la libertad significa algo, es el derecho a decirles a los demás lo que no quieren oir.

Blondie