Toda una Vida Rota en un Segundo...
Hoy es día de Navidad, ese día que por cojones tiene que ser feliz, ese día que la sociedad, la religión y el Corte Inglés nos vende como un día feliz en el que tenemos que reír y hacer felices a los demás…
Pues yo esta mañana he llorado largo rato desconsoladamente…He llorado mucho, mucho rato….
Tengo una vitrina de cristal y en ella he ido poniendo todo aquello que ha significado algo en mi vida, en mis viajes, ese tranvía de Lisboa, esa rosa azul tan maravillosa de Capo di Monti o esas otras rosas de cristal de Murano compradas con mimo en Venecia o esos Mickey’s de cristal comprados un día que mi cara estaba iluminada de felicidad en Disney Land Paris, tantas cosas hay en esa vitrina, toda una vida, toda mi vida en recuerdos, geodas pequeñitas que yo misma saqué de la tierra en África, la rosa del desierto, única irremplazable, esa rosa negra disecada que me regalaron y que tanto significa para mi, esa raqueta de tenis minúscula que tanto me hizo sonreír y soñar, mi pluma de cristal, que escribe como escribía Cervantes, y tantas cosas más, sobre todo rosas, de todo los tipos, rosas, rosas y rosas…
Pero esta mañana de repente ha hecho plof, se ha caído la balda de arriba y se ha roto todo, yo me he sentado en el suelo y lo miraba llorando, no podía dejar de llorar, no por los objetos, sino por lo que significaban para mi, por el tiempo que había tardado en atesorarlos, por el amor que les tenía, por lo que significaban para mi. Y lloraba y lloraba y no podía dejar de llorar, sentía que me rompía por dentro con ellos, que se me rompía el alma hasta que de repente me he dicho a mi misma ¿y que?, son solo objetos, objetos que tirarán cuando muera, se han roto pero no el recuerdo imborrable que cada uno de ellos significa, esos no los puede romper nadie, absolutamente nadie, tan solo mi memoria el día que la pierda o cierre los ojos para siempre….
He barrido hasta el último cristal, los he tirado a la basura y he decidido que nunca más atesoraré objetos, tan solo recuerdos en mi corazón, en mi mente y en mi alma…
Blondie