11 de septiembre de 2013

IRA



Las malas hierbas del camino aumentaban y según caminaba se convertían en maleza pero él con su hoz la iba cortando con secos y certeros golpes y allí la dejaba a su paso, tirada para que alguien la recogiese.

Los rayos dorados del sol de Castilla eran testigos de su rabia al cortar la maleza y así continuó de sol a sol y al día siguiente también y al otro, hasta llegar a su destino.

Lo que no supo jamás es la destrucción que dejó a su paso, lo que él pensó que era maleza, era trigo y destrozó toda una cosecha con su ira…

Su ira no le dejó ver y Castilla se quedó sin trigo ese año

Blondie

Creative Commons License
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.