LOS REYES MAGOS DE ORIENTE
El día que deje de poner mi zapato, agua, polvorones y turrón
en un platillo para Los Reyes Magos de Oriente, apretar mis puños muy, muy fuerte
y no querer dormirme para oírlos llegar será porque he perdido el juicio o lo que es aún peor, que he dejado de
creer en la magia…
Vuelvo a apretar mis puños fuerte, fuerte, a pensar en
Melchor, Gaspar y Baltasar, en sus camellos, sus capas de armiño y en sus coronas y turbantes y
nada, que no quiero dormirme, que quiero estar despierta para ver si les pillo
sin que ellos me vean, pero el sueño me vence y poco a poco caigo en el letargo pensando en ellos…
La niña que hay en mi desea intensamente que le traigan algo
mágico, tal vez intangible, algo que desea desde hace mucho tiempo, ellos lo
saben y creo que todo dependerá de si llegan Los Reyes Magos a mi balcón o un simple paje
camellero…
Felices Reyes
maliZia kiss