23 de septiembre de 2016

El Chiringuito


En el chringuito de la playa, esta mañana, solo estábamos dos pero no juntos sino en diferentes mesas, separadas por una distancia más que prudencial, cada uno nos habíamos preocupado de asegurarnos nuestro espacio vital, la playa estaba vacía aunque el sol era radiante y la temperatura de lujo para ser el primer día de otoño.

Ni más ni menos, eso escuchaba allí, cantaban Los Chichos y me pareció un poco triste y decadente estar allí en ese momento con música de ese estilo en otoño, termina esa canción y sigue otra no se el titulo o si lo se lo he olvidado pero dice algo así como, libre, libre quiero ser, quiero ser libre….

Acompañando a Los Chichos los continuos ping, ping de los móviles de él y del mío, pero curiosamente ninguno de los dos los mirábamos, estábamos allí, estáticos mirando hacia el mar con Los Chichos de fondo

Dame veneno, dame venenoooooooooooo, jo que me están entrando ganas de dar palmas caramba, que esto de Los Chichos tiene su aquel en este lugar ¡caramba!, que lo tiene, créanme….

Hoy cierran este chringuito y yo me despido de él saboreándolo, tengo en mi mesa una agenda y escribo, escribo esto que no tiene mucho sentido ni se a donde llegará o como terminará.

Jope como le gustan los chichos al dueño de este chringo, que nos pone el disco entero, ufff, que yo nunca había prestado atención a sus letras y de todas se aprende, de todas…que se lleven el toro del aguaaaaaaaaaaaa

Caramba con Los Chichos exclamo más alto de lo que quería, que nooooooo, que este es El Fary , me dice el camarero y nos reímos los tres, él en su mesa con su móvil haciendo ping, ping, su tableta y su mojito.

¿Por qué estas sola?, me pregunta y yo me hago la gallega y le contesto ¿y tú?

 Coño que está sonando Paquito El Chocolatero, esta tengo que bailarla, venga vamos le digo, vamoooooooos y no se lo piensa ni un segundo se levanta y hala a bailar que nos ponemos los dos ante el asombro del camarero, ahí, en el chiringuito, en otoño, con calor y un mar escandalosamente bello y mientras bailamos me bombardea a preguntas ¿cómo te llamas? ¿de donde eres? ¿estudias o trabajas?

Y ahora El Coyote, no rompas más mi pobre corazón, no doy crédito a lo que estoy viviendo, me parece tan surrealista que me encanta

No soy lo mejor ni tu única opción, no tengo más partido que mi amor….laralarala…no rompas más mi pobre corazón…

Me llamo maliZia le digo jadeando de dar tantos botes, yo Grimaldo, malaaaaaaaaaa, mira que eres malaaaaaaaaa, ¡ que la detengan, es una mentirosa, malvada y peligrosa, yo no la puedo controlar!, sei italiani? le pregunto entre jadeos,, sei, sei, me dice riendo… que sonrisa tan bonita que tiene el tío, pienso, y seguimos bailando y dando botes.

¡Torero!, poner el alma en el ruedo cantan ahora…no importa lo que se venga pa que sepas que te quiero como un buen torerooooooooo

¡Pues vaya manera de empezar el otoño!, esto mola, ya lo creo que mola, mola mucho….

¿Qué cómo ha terminado la cosa?, pues los dos bañándonos y jugando en el agua a la pelota con Julito Iglesias cantando Hey, no vayas presumiendo por ahí… y nuestros móviles en las mesas haciendo ping, ping, ping

Y aquí se acaba el escrito, el resto de la historia pretendo que sea solo para mí…

Blondie

maliziakiss.com

Creative Commons License
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.