3 de abril de 2015

EL SOL ESTÁ TRISTE

El sol se escondió tímido al saber que ella venía, llevaba todo el día temiendo ese encuentro, sabía que si la miraba caería rendido bajo su influjo.

Buscó pues un pequeño rincón en el universo donde cobijarse, desde el que poder ver la inmensa luz de la luna sin ser atrapado por su belleza, sin caer en su hechizo, sin que pudiese arrastrarle a sus confines.

Sabía  que si se aproximaba a ella, le haría trizas con su filo mágico, le haría desangrar su poderosa y potente luz hasta sumirse en oscuridad

Pero en el último instante fue débil y corrió a su encuentro, la miró y quedó prendado de su belleza, de su magia y ahí es cuando supo que estaban condenados a no poder pasear juntos por el universo, que lo suyo era un amor imposible…

Al día siguiente lloró lagrimas de colores, de siete colores, para que ella pudiese verlo allá donde se encontrase en ese momento, para que una gaviota le llevase el mensaje de su tristeza de enamorado, para que no pudiese olvidar que él, amarillo y brillante por su ciega pasión, poderoso y fuerte en apariencia, había sucumbido a su encantos y que jamás, por mucho empeño que pudiese poner, jamás podría olvidarla…

Blondie

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