16 de julio de 2008

No Vueles Más Tunicia

Tunicia volaba y volaba, buscando ese rincón lejano donde hallar la serenidad y la felicidad. Ese lejano lugar donde olvidar.

Sus alas se movían suavemente, acompasando el estado de su espíritu. Atravesó grandes océanos en los que vio piratas y saqueadores de almas, ladrones de pasiones. Remontó altas montañas en las que vio águilas imperiales y poderosas que reinaban en las alturas, a las que solo interesaba poseer su maltrecho corazón. Descansó en picachos donde vislumbraba en la lejanía verdes prados llenos de esperanzas, pero que al bajar a ellos le mostraban su verdor intenso y falso en el que sus esperanzas se confundían con el verdor del prado y no podía hallarlas. Limpió sus alas con las nieves del Kilimanjaro, sintiendo con cada copo de ellas como le deslumbraban mostrándole el negror de su tristeza.

Descansó en el minarete de una mezquita escuchando bellos cánticos y comprendiendo que hablaban otro idioma, que no les entendía, ni podía hacerse entender…

En campanarios de iglesias donde el repiqueteo de sus campanas le impedían pensar, le aturdían...

Se unió a otras aves que volaban y la arrastraban en su peregrinaje y decidiò que era mejor volar sola…

Buscó nidos abandonados en busca de un poco de calor y del alimento que no hallaba pero siempre que encontraba uno estaba vacío, no podía alimentarse y dejó de comer…

Preguntó a un peregrino por el camino para llegar al nirvana, pero él tan solo le habló de sus propias penurias, de sus carencias y no consiguió que le mostrase el camino.

Desesperada y fatigada de tanto volar decidió regresar nuevamente al lugar donde dejara a Galeote, donde comenzara a volar, comprendiendo que las alas no sirven para huir, que a veces es mejor pisar firme el suelo, que es preferible enfrentarse a un sentimiento…

Blondie

1 comentario:

Ernesto Durruti dijo...

Quien jamas se haya puesto unas alas para desaparecer del mundo y buscar otras islas, no puede comprender que la publicidad de los cruceros y viajes paradisiacos, es solo eso, fachada, son tambien mundos.

Volar es tambien sentir el frio de la soledad en la nube. Y cuando se esta en el aire, contemplando paisajes extraordinarios y el silencio es aterrador, nos damos cuenta que somos eso.... ¡¡5 sentidos!!

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