16 de octubre de 2014

Amores Secretos

Nunca le digas que le amé con lujuria a pesar de mi desdén, no quiero que sepa que con él aprendí a escribir amor en mayúsculas, que todas esas burbujas y mariposas que cuentan que pululan por los estómagos enamorados, en el mío  procrearon y lo convirtieron en un inmenso mariposario donde aleteaban juguetonas por el día con sus miradas y por las noches con sus caricias.

No, por favor, nunca le digas que le amé hasta el desmayo porque yo jamás se lo dije…

Blondie