3 de enero de 2012

BALANCE


Llevo años escribiendo en este loko diván y en realidad no sé muy bien por qué he cuajado de letras este lugar, una absurda página que está en el espacio, con sensaciones, sueños, realidades, ficciones, fantasías, tristezas, alegrías, angustias, pesares, penas, risas, bromas, canturreos y más, más cosas que dejo por decir porque posiblemente no me vienen ahora a la mente, pero que están, ahí están también, aunque las omita.

A veces he escrito con el deseo de ser leída, esperando críticas sobre mis escritos, críticas feroces, negativas, insultantes incluso, otras veces he escrito sin plantearme si alguien pudiese leerlo, sin importarme si alguien entendía mis letras, simplemente sentía la necesidad de hacerlo y lo hacía, en otras ocasiones he esperado ser adulada y si lo han hecho me he sentido gratificada, para mí era como la gasolina que mueve el motor de mi pluma, el carburante que necesitaba para continuar y no caer en el desánimo.

La mayoría de las ocasiones he escrito simplemente para mi, he convertido mi loko diván en mi paño de lágrimas y mi cofre de ilusiones, he viajado por él a mi antojo y lo he sentido muy mío, sí, he sentido que este lugar solo tenía una llave y yo era la propietaria, un lugar en el que mando yo y yo decido el camino que lleva en cada momento, he sentido que es mi obra, mi burda obra, pero mía, de cabo a rabo, de principio a fin, toda diseñada por mi y para mi. Un lugar en el que nadie puede meter baza. Necesitaba eso…

He cantado en este espacio y mucho y he cantado mal, muy mal, pero quería hacerlo, quería cantar para mí sin importarme lo que pensasen los demás por mis terribles desafinos, medicaba mi alma con las canciones que a mi me gustaban o me hacían sentir algo o simplemente me parecía que en ese momento encajaban con lo que yo quería plasmar aquí.

He leído escritos míos e incluso esos poemas míos que ni sé si se parecen a un poema pero que para mi lo han sido, los he leído mal, lo sé, sin entonar, pero ¿qué más da?, sí, que mas da…porque yo no quiero ser cantante, ni lectora sublime de poemas, ni escritora, no quiero ser nada de todo eso, ni periodista, ni entrevistadora, ni nada, nada de nada, simplemente quiero ser yo misma...

A cuento de esto viene a mi cabeza ahora esa frase mía que publiqué hace no mucho tiempo aquí, “poseo la libertad de no querer ser nada” y con esa frase quería decir esto, que simplemente quiero ser yo, con mis defectos, mis aberraciones gramaticales, con mis sueños plasmados y con algún que otro relato mío que si me ha parecido bello, que he escrito yo y me he sorprendido al releerlo de que hubiese sido capaz de hacerlo.

No he querido desde hace muchísimo tiempo comentarios en este diván, no porque los tema, sino porque no los necesito, los comentarios son manejables desde una página y puedes si quieres hasta eliminar los que te hieran, no es ese el motivo de no aceptarlos, simplemente no los necesito ni necesito meterme en ningún entramado de esos de blogs en los que muchos te leen y te adulan y tú lees a muchos y los adulas, no, no necesito eso, aunque reconozco que eso está muy bien, enriquece y enseña a compartir, pero yo necesitaba y no sé si aún lo necesito, aislarme, sentirme a salvo en mi isla de letras amontonadas y sentidas.

Y ahora, recién empezado el 2012 hago balance conmigo misma de mi loko diván y me pregunto, ¿y ahora qué?, ¿seguiré jugueteando a ser escritora, actriz, cantante, modelo, bruja, santa, mala malísima, buena, dulce, arpía, cronista, mordaz, hiriente, tierna, visceral, apasionada, áspera, y mil cosas más entre los folios de este espacio?,o por el contrario ¿pararé mis lokuras y korduras en mi viejo y loko diván de mis amores?

El tiempo lo dirá…ese tiempo que nos está tocando vivir, ese tiempo de crisis hasta personales, sí, el tiempo lo dirá, al final siempre es él el que tiene la última palabra…

Blondie

Creative Commons License
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.